"Con el pecado mortal nuestras vidas transcurren con Inutilidad y tristeza..."
Lo único que lamento es que eso ya no me permita ser hija de Dios, pero mi vida era muy miserable aún luchando todos los días por estar en gracia.
Sé que fue la religión y creer en Dios lo que me salvó y lo que me ha hecho quién soy hoy, pero soy más feliz ahora de lo que fui estando en gracia.
Me hace falta Dios, eso lo sé, pero para mí la felicidad no me la dió la religión ni sus prácticas...
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